La mayor disponibilidad de smartphones en la región, así como las mejoras en la infraestructura móvil permitieron, por un lado, un inigualable crecimiento de audiencia (se proyecta que Latinoamérica tenga el mayor aumento de gamers de cualquier región desde 2015 hasta 2024) y, por el otro, un aumento en el tiempo de juego.
Además, la potencialidad del mercado en Latinoamérica sigue siendo enorme. La demanda por live streaming y los eSports, especialmente en mobile, serán los grandes motores del sector.
Las marcas tienen aquí tres oportunidades clave:
- Fidelizar a los nuevos jugadores y sumar usuarios: la pandemia ayudó a captar nuevas audiencias y es vital concentrarse en retener a esos jugadores, al tiempo que se deben ampliar las maneras de conectar con nuevos usuarios (sobre todo, en móvil) y maximizar los ingresos.
- Maximizar las experiencias móviles de alta calidad: los altos costos de importación siguen siendo una limitación para los jugadores a la hora de acceder a juegos de nivel premium y a hardware de consolas tradicionales. Por eso, mobile resulta la respuesta a esos obstáculos, ya que ha evolucionado para ofrecer experiencias más relevantes.
- Acompañar el consumo de streaming de juegos en vivo: la audiencia de este tipo de contenido se disparó a partir de 2019: pasó de 63,7 millones en ese año a 75,5 millones en 2022. YouTube es una de las plataformas preferidas de los usuarios latinoamericanos. Seguir streamers y ver diversas ligas de eSports está de moda en la región, por lo que las marcas deben buscar la forma de participar de esa cultura. Una forma es creando contenido con los streamers más seguidos, como elrubiusOMG, JuanSGuarnizo y MKLeo.
Mientras que hace casi una década el mercado de los videojuegos dependía casi exclusivamente de las consolas, hoy son las plataformas digitales las que marcan el ritmo. Es allí donde las personas desarrollan sus habilidades y comparten sus experiencias de juego, especialmente a través de las transmisiones en vivo.
Ser parte de esa comunidad es el verdadero desafío de las marcas, para no quedar como un NOOB (new or inexperienced player) y recibir, en cambio, un GGWP (Good Game, Well Played).